El Aura: otra mirada

“Recuerdo todo lo que veo”, dice el personaje epiléptico, observador y muy detallista interpretado por Darín, quien conserva todos los datos con sólo mirarlos.

Ante todo, debo aclarar que la película no me la recomendaron, con lo cual mis expectativas fueron más bajas de las habituales. Más teniendo en cuenta el nivel del cine que estamos acostumbrados a ver ultimamente (léase La guerra de los mundos o Spider Man, etc, etc). A quienes me habían comentado que la película era “lenta y aburrida”, les respondo que "necesita" ser de esa manera. La historia transcurre con una notable lentitud, quizás al mismo ritmo con el que actúa Darín .

En un viaje de caza, luego que su mujer lo abandona, las circunstancias hacen que el protagonista (cuyo nombre no se llega a develar en la película) se vea envuelto en el crimen que siempre planificó. De ahí en más, el argumento logra jugar con el espectador, dividiéndolo entre la fantasía y la realidad (de hecho, hay más de una interpretación del final).

En pocas películas la música acompaña tan bien al relato como en ésta. El lenguaje cinematográfico es brillante; hay muchos silencios, personajes oscuros y un ambiente desolador. Les recomiendo que no vayan esperando una sucesión de acciones al estilo Nueve Reinas. El Aura tiene un ritmo lento pero preciso, disfruten de cada escena que les va entregando la pantalla grande.

En conclusión, una muy buena segunda película del director Fabián Bielinsky, que se empieza a perfilar como uno de los buenos directores argentinos de cine. Además, otra inmejorable interpretación de Darín que crea un personaje obsesionado con el crimen, misterioso y cauteloso, donde todo lo piensa y calcula.

¡Gracias por tu aporte, Ariel Bettin!