Bienvenidos al tren

Somos tan poco originales y creativos que vamos a repetir lo que seguramente otros ya dijeron. Pesimistas, decadentes y rutinarios. Así somos. Vivimos la misma vida que todos los demás, no queremos ser distintos.
La idea es integrar una comunidad de enfermos por el cine. Los síntomas: ardor profundo en los ojos, dolores intensos en el coxis, síndrome del turista, atrofia muscular, perdida de la noción del tiempo y el espacio, mitomanos, ninfomanas y con poca suerte. Depresiones temporarias, inseguridades, vértigo y agorafobia. Odio incontrolable hacia el sujeto que come pochoclo en tu oreja.

Próximamente, un Manifiesto, una recomendación y como invitado especial Pochoclín.