Una película papal

Con Benedicto XVI, ya aprendí muchas cosas. Hay que defender las tradiciones navideñas y luchar contra la “cultura moderna y consumista” que intenta “hacer desaparecer los símbolos cristianos de la Navidad”. También, hay que ir al cine con amigos y comer muchas palomitas de maíz. Sí, parece que a los Papas se les está permitido ir al cine. Esta vez, asistió en el Vaticano a la proyección de la TV Movie Juan Pablo II, interpretada por el ex Cowboy de medianoche John Voight.

La película, producida por la RAI junto a otras televisiones europeas y la CBS, comienza con el atentado que sufrió Juan Pablo II en la plaza de San Pedro del Vaticano a manos del terrorista turco Agca. Además de Juan Pablo II, en proceso de montaje se encuentran también otras dos Pope Movies: Karol, un hombre elegido Papa y Karol, un Papa que fue siempre un hombre.

Otras realizaciones sobre el Vaticano son El gran pescador (1959) sobre el primer Papa, Pedro, tuvo su homenaje en una película de Frank Borzage. La más espectacular película papal es Las sandalias del pescador en la que un perfecto Anthony Quinn recrea la figura de un Papa venido del Este (como Wojtyla), que sufre las atrocidades comunistas en Siberia y es elegido sustituto de Pedro. En el reparto los enormes Laurence Olivier, John Gielgud y Vittorio de Sica. Lo mejor del film es su final, cuando el Papa sale al balcón y ante estupor de cardenales, que los tesoros del Vaticano serán vendidos para los menos favorecidos del mundo, para los pobres. Una buena película de política ficción, sin duda. (VB)